Caramelo líquido (muy fácil y no endurece)

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El caramelo líquido se emplea para múltiples de elaboraciones de postres, siendo los flanes los más populares.

Aprende a prepararlo en casa de forma muy sencilla, consiguiendo el mejor resultado «un caramelo que no endurece».

Espero que os animéis a prepararlo, porque es muy fácil de hacer y está más rico que los que encontrarás en cualquier supermercado!

 

 

 

 

 

Ingredientes:
200 grs. de azúcar blanco.
8 Cdas. de agua.
50 ml. de agua caliente.
2 Cdtas. de zumo o jugo de limón.
Preparación:
En un cazo echamos el azúcar, las 8 cucharadas de agua y el zumo de limón, ponemos a fuego medio y dejamos que se haga el caramelo sin moverlo en ningún momento.

 

 

Cuando coja un bonito color dorado, (no dejar que el caramelo se ponga muy oscuro porque amargara), añadimos el agua caliente poco a poco con mucho cuidado ya que el caramelo salpica y suelta mucho vapor al echar el agua.
(Hay que tener mucha PRECAUCIÓN cuando estemos preparando caramelo líquido, ya que alcanza temperaturas muy elevadas y por lo tanto tenemos que ser precavidos a la hora de manipularlo para evitar quemaduras, no hay peor quemadura que la del caramelo líquido).
Una vez añadido el agua caliente, mezclamos bien y retiramos del fuego, dejamos que el caramelo pierda el calor (no se te ocurra probarlo hasta que esté bien frío).
Pasado el tiempo, ya lo podemos echar en un tarro de cristal.
Al principio lo veréis muy líquido, pero espesará a medida que va enfriando.
Se conserva en un tarro de cristal bien cerrado en la despensa, durante un mes.

 

 

3 comentarios en «Caramelo líquido (muy fácil y no endurece)»

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