Durante siglos las torrijas fueron un alimento humilde y su sencillez las convirtió en un postre perfecto tras un potaje de vigilia en los días de cuaresma, cuando la iglesia católica prohíbe comer carne.
Estás torrijas de nata son muy tiernas y cremosas, es un postre tradicional de la Semana santa en España, su elaboración es muy fácil y sencilla, consiste en remojar las rebanadas de pan en la nata aromatizada con canela, cáscara de limón y vainilla, luego las pasamos por huevo batido y las freímos, por último se rebozan en una mezcla de azúcar y canela, obteniendo un resultado espectacular, ideales para disfrutarlas en cualquier ocasión, para desayunar, merendar o como postre.
Espero que os animéis a preparar estás deliciosas torrijas de nata, porque están riquísimas!
Ingredientes:
14 rebanadas de pan especial para torrijas (lo puedes encontrar en panaderías y supermercados, pero si lo prefieres lo puedes hacer casero, puedes ver la receta (aquí).
1 litro de nata para montar o crema para batir (35% M.G).
4 o 5 tiras de cascara de limón.
3 palos de canela.
1 Cdta. de pasta o extracto de vainilla.
100 grs. de azúcar.
3 huevos L.
Aceite para freír las torrijas.
Azúcar y canela molida para rebozar las torrijas.
Preparación:
Ponemos en un cazo la nata, las tiras de cáscara de limón, los palos de canela, el azúcar y la vainilla, llevamos a ebullición sin dejar de remover y cuando hierva retiramos del fuego, tapamos el cazo y dejamos infusionar 15 minutos.
Pasado el tiempo, retiramos las tiras de limón y los palos de canela de la nata.
Batimos los huevos y ponemos un perol al fuego con abundante aceite.
Vamos mojando las rebanadas de pan en la nata (tienen que quedar bien empapadas), seguidamente las pasamos por el huevo batido y las freímos hasta que estén doradas por ambos lados, las ponemos sobre papel absorbente de cocina para retirar el exceso de aceite.
Mezclamos el azúcar con la canela molida a nuestro gusto y rebozamos las torrijas por ambos lados y ya las tendremos listas para disfrutarlas.
(Se pueden comer templadas o frías).
